En psicología, el concepto de asertividad surge
originalmente en Estados unidos, en el contexto clínico, a fines de la década
de 1940. Así, el estudio de la conducta asertiva se remonta a los escritos de
Andrew Salter (1949), en su libro Conditioned Reflex Therapy, donde describe
las primeras formas de adiestramiento asertivo. Más tarde, a Wolpe (1958) se le
señala como el responsable del desarrollo del concepto de asertividad que se
utiliza con mayor frecuencia. En la década de los setenta, varios autores se
interesan en el concepto de asertividad y en el entrenamiento asertivo, dando
paso a su expansión y desarrollo.

Durante esta época surgieron enfoques tales como el enfoque
humanista, que aborda la asertividad como una técnica para el desarrollo de la
realización del ser humano; el enfoque conductual, que desde la perspectiva del
aprendizaje social de Bandura (1969) plantea que la conducta asertiva o no
asertiva se aprende a través de la observación de modelos significativos; el enfoque
cognoscitivo, representado por Lange y Jakubowski (1976), quienes sostienen la
necesidad de la incorporación de cuatro procedimientos básicos en el
entrenamiento asertivo: enseñarla diferencia entre asertividad y agresividad;
ayudar a identificar y a aceptar los derechos propios y los derechos de los demás;
reducir obstáculos cognoscitivos y afectivos para actuar de manera asertiva y
reducir ideas irracionales, ansiedades, culpas y a su vez desarrollar destrezas
asertivas a través de la práctica activa de dichos métodos.

Es así como se empiezan a formar los conceptos de asertividad que analizaremos mas adelante.
Comentarios
Publicar un comentario